Escrituras que se trasbocan al abandono de lo cotidano, esta segunda edición del segundo libro de los Cuadernos de la sequía replica, luego de diez años, la ofrenda trastocada del epígrafe de Catulo: ¿A quién voy a dedicar este elegante y nuevo libro recién alisado con la áspera piedra pómez?
Sobre esta «lengua excedida», como alguna vez se la nombró, se pueden leer dos textos aquí.